REPORTAJE FOTOGRÁFICO: AEROPUERTO DE TERUEL
Situado en los terrenos del antiguo aeródromo de Caudé, el Aeropuerto de Teruel —también conocido como Plataforma Aeroportuaria de Teruel (PLATA)— fue inaugurado en febrero de 2013. Desde esa fecha, las cifras de negocio de esta entidad no han hecho otra cosa que aumentar.
Concebido como un aeropuerto sin pasajeros, sus funciones principales son dos: por un lado, sirve como área de estacionamiento de larga estancia para aeronaves en activo; por el otro, ofrece servicios de mantenimiento, acondicionamiento, reciclaje y desmantelamiento de aviones.
Pero esto no es todo: sus instalaciones acogen, además, una escuela de pilotos comerciales; varias empresas pertenecientes al sector de las nuevas tecnologías aeroespaciales; una base de helicópteros medicalizados; un banco de pruebas de motores de cohete; y un área de repostaje para aeronaves, entre otros.
Con 340 hectáreas de superficie y espacio para 250 aviones, el Aeropuerto de Teruel es actualmente el aparcamiento de aeronaves más grande de Europa, además de uno de los mayores del mundo. Pese a estos datos, la idea de su director, Alejandro Ibrahim Perera, es seguir creciendo tanto en superficie como en volumen de negocio.
Con todo, la extensión de la Plataforma Aeroportuaria de Teruel no es su única virtud: la zona en la que se ubica cuenta con un espacio aéreo totalmente abierto y sin ninguna limitación para el desarrollo de actividades aeronáuticas, además del clima seco y soleado característico de la provincia.